Cuando entramos en el mundo espiritual tenemos el deber de ser honestos sobre qué nos motiva y nos acerca a ser una persona espiritual, de esta manera evitaremos el vernos envueltos por alguien que utilice el disfraz espiritual para obtener beneficios a nuestras expensas.
Es importante que siempre nos analicemos interiormente para evitar y reconocer nuestras zonas oscuras como nuestros miedos, nuestros dolores físicos o emocionales y solo así podremos enfrentarnos a nosotros mismos y no necesitar de terceros “Maestros” para que nos lleven y guíen nuestra propia vida.Trataremos este tema para aprender a distinguir lo real de lo falso, de energías que podemos creer que son verdaderas y simplemente es que están viendo tu debilidad interior del momento e intentan absorber tu energía y mentir que si son personas contactadas con la fuente de Luz Divina.La verdadera espiritualidad no es “elevada”, ni es un camino, ni una carrera en la que competir con los demás. Este tiempo en el que estamos , la naturalidad, el fluir y el sentir nos llevará a conectar desde el interior, sin necesidad de vestirnos con el uniforme espiritual. Se requiere una vivencia mas real, una conexión mas firme con la tierra y mucha mas responsabilidad con uno mismo.